jueves, octubre 09, 2008

En estos últimos dos o tres días y por esas cosas desencontradizas estuve viniendo a pie a la oficina. Sola.
A falta de una mano que agarrar, ocupo las dos que me quedan libres en tomar el volantito que ofrece siempre el mismo señor, en una de las esquinas de Tribunales. Sigo mi camino mientras hago un barquito de papel (ese volante tiene el tamaño justo). Tardo en hacerlo lo que me lleva caminar hasta el Teatro Colón; unos tres o cuatro minutos. Lo tiro siempre en un tacho distinto, así, prolijamente armadito, con la ilusión de que alguna de las personas que día a día pasan mirando o revolviendo la basura se quede pensando quién será el loco o la loca que todos los días deja un barquito de papel distinto en los tachos de basura de la zona de Tribunales.

Mientras mi cabeza piensa en esas tonteras, el otro hemisferio escucha...




14 comentarios:

Signaturio dijo...

Siempre me han gustado esas cosas. Yo solía escribir breves notas y las dejaba en taxis, colectivos y consultorios. Los temas eran diversos: misteriosas, románticas, suicidas, disparatadas, expiatorias. Naturalmente, los textos eran ficticios. Lo hacía para entretenerme; seducido por una ilusión semejante a la tuya.

Fodor Lobson dijo...

papiroflexia urbana

Blue Fairy meets Gepetto dijo...

me encanta hacer barquitos de papel, normalmente los hago en confiterias o bares y los dejo colgados del sorbete del licuado que me tomo. antes les ponia nombres ahora son sin bautizar aunque dice que eso trae mala suerte no?

Demian dijo...

yo hago entre 4 y 9 grullas y las disperso por todos lados
a ver que pasa
despues cuando termine las 1000 las pondre por toda av. de mayo

voy por la 750 mas o menos

unServidor dijo...

Estás extrañando el Ñandubaysal...

El rincòn de mi niñez dijo...

Uy....Muy creativo el uso que le das a esos volantitos.Los años que no hago barquitos de papel!! ya ni lo recuerdo...
No estaría nada mal ,echar a navegar mi mente.
Buena vida,buen viernes.

Cassandra Cross dijo...

Signaturio: No me veo llegando a ese nivel de elaboración. Asombroso!
Me habría gustado encontrarme con una de esas notitas...

Fodor: Ou iéah! Sabe que pensé exactamente en el término "papiroflexia" y en usted cuando escribía este post? Ahahá! (no se la esperaba! ;-) )

Blue: ¿Cómo que "mala suerte"? Bautizarlos? No bautizarlos? Dejarlos colgados del sorbete del licuado? Mí no comprender... aguanten los barquitos!!

Demian: Wow. Lo tuyo es un arte. No, no las grullas. Lo otro. Eso.

UnSer: Ya viene la segunda parte del post y vas a entender un poco mejor. Y hablando de eso... Ñandu, allá vamos!! :-P

Marisa: Y las flechillas? Y los avioncetes? Y los "sorteadores"? Nada más lindo que llenar un papel de dibujos hechos con fibritas Sylvapen y plegarlos todos, aunque no sea muy elaborado, aunque sea como decís para dejar vagar la mente...

Buen viernes y gracias a todos por pasar!

Walter Leonardo Doti - (Filosofo Multimedia) dijo...

¿Advertirá alguien nuestros pequeños gestos?

B dijo...

no me acuerdo cómo se hacían! uyyy
qué lindo que te acuerdes.
yo creo que la gente percibe esas cosas, alguien tiene que percibirlo.

Capitan de su calle dijo...

Jaaa! Yo tambien hago eso. Barquitos. Con cualquier volante ( a veces quedan chingados)

pero por almagro, no se preocupe. Debe haber otra gente.

Anónimo dijo...

A eso llamo yo ver la vida con otros ojos. Me encanta.

Cassandra Cross dijo...

Walter: Si hay algo que aprendí hasta ahora es que siempre hay alguien que lo adviete.

Blanc//: Nunca es tarde para re-aprender!

Pablo: No me molesta compartir el target, ni aprender origamis nuevos!

Lucy: ^_^ (igual, no puedo evitarlo!)

Gracias por pasar!

ADN dijo...

lindo el post. A veces me cuesta imaginar que la gente que tiene que revolver tachos de basura se pueda detener a pensar por qué alguien hace barquitos de papel y los tira en el mimso lugar en que alguien busca su comida.

Cassandra Cross dijo...

ADN: A mí también, hasta que me acuerdo que cualquier persona, por penosa que sea su vida, puede tener un instante de desconexión mental, y el barquito podría ser ese disparador para su imaginación tapada de preocupaciones inmediatas...

Saludos y gracias por tu visita!