viernes, julio 31, 2009
Encuesta cerrada
domingo, julio 26, 2009
Logros personales de hace un tiempo para acá...
jueves, julio 23, 2009
In their beds, in their kitchens, in their attics, in their basements
Whites can help us, but they can't join us. There can be no black-white unity until there is first some black unity. We cannot think of being acceptable to others until we have first proven acceptable to ourselves. Concerning nonviolence: it is criminal to teach a man not to defend himself when he is the constant victim of brutal attacks. There are problems in the community. Some of the examples of those problems are the vices that destroy the moral fibre in our community. Drunkenness, drug addiction, prostitution, organised crime. They rob the Negro community of probably 90% of its economic potential and moral potential. One of my reasons for going out on a limb as I have is to try and make white people be shocked, awake to some of their senses, because if they don't awake, they're going to find out that this little Negro that they thought was passive has become a roaring, uncontrollable lion, right in, right at their doorstep - not at their doorstep; inside their house, in their bed, in their kitchen, in their attic, in their basement. And if you know that in time, you can do something about it."El extracto del audio:
Estoy teniendo un final de década extraño. Sin dudas.
miércoles, julio 22, 2009
O todo como el orto
Y si le erraste en todo lo anterior, cagate. A llorar a la iglesia.
martes, julio 21, 2009
Servicio a la comunidad - Miyazaki x 2 en Artecinema
"No soy yo quien hace la película. Es la propia película la que se va haciendo"
"- Llama la atención que como resultado de ese método de trabajo basado en la mímesis, la mayor parte de sus protagonistas sean niñas
- No sé qué decirle... Será que amo profundamente a las mujeres. Por lo visto me identifico con ellas"
"Yo tiendo a ser una persona pesimista. Pero trato de no transferir ese pesimismo a los niños. No creo que los adultos deban imponer su propia visión del mundo sobre los niños. Creo que más bien se trata de entrar en diálogo con el modo en que los niños miran el mundo"
"Me parece que toda película para niños bien hecha termina interesando también a los adultos. Tal vez la única diferencia entre un film para chicos y otro para adultos resida justamente en el pesimiso u optimismo de la historia. Una historia para niños mira el futuro con esperanza, mientras que en las películas para grandes el pasado tiene un peso mayor".
lunes, julio 20, 2009
Dicen que tengo glamour (oculto ha de estar)
Manía:
Pecado capital:
La gula y la lujuria.
Mejor olor del mundo:
El del césped y la tierra mojada.
Si el dinero no fuera problema:
Recuerdos de la infancia:
Habilidades como ama de casa:
Todas, menos planchar y coser (aunque en esta última me defiendo).
Lo que menos te gusta hacer en casa:
Repasar los muebles, sobre todo porque hay que hacerlo a diario y no da (no da el tiempo, no dan ganas, ¡no da!).
No habilidades como ama de casa:
Planchar.
Una frase:
Paseo para el alma:
Un buen momento compartido con la(s) persona(s) justa(s).
Paseo para el cuerpo:
Perfume que usa:
Perfume masculino:
Le presto más atención al olor natural del hombre que al perfume que lleva.
sábado, julio 18, 2009
Sueño con muertos / Sobre la memoria
Hace tres días que sueño con muertos. Con películas de muertos, con muertos queridos, con situaciones de muerte, con la oscuridad de edificios derruídos donde ya no vive nadie.
A diferencia de otros sueños recurrentes, mis sueños de muerte siempre se dan seriados. Duran entre dos días y una semana entera. Algunos me angustian mucho. Otros me dejan impotente.
El de anoche me hizo llorar como hacía mucho que no me pasaba. Soñé con mi abuelo paterno, ese que es leyenda en la familia por su mal genio y que tuvo hacia mí sólo palabras y gestos de cariño. Al que conocí menos, y al que llegué a querer todo lo que su reserva y secotez de tano conservador me lo permitieron. Justo al que dicen que me parezco más: igual de grande, igual de gringa, mandíbula cuadrada, los mismos ojos.
Hoy cumpliría años mi otro abuelo. Al que llegué a conocer más, al que quise todo lo que mi propia reserva de chica rara y tímida me lo permitió. Al papá de mi papá lo perdí muy temprano, por esas cosas que tienen los conflictos familiares y porque no vivió más allá de mis doce años. Al papá de mi mamá lo disfruté todo lo que pude, por la mayor proximidad afectiva y geográfica y porque fue el primer adulto con el que pude hablar de muchos intereses en común: la música, el arte, las lecturas, la televisión.
A mi abuelo paterno no recuerdo haber llegado a decirle que lo quería. Al materno se lo dije muchas veces, y aún así tenía deudas pendientes con él cuando murió. Las deudas que no se saldan antes de que la persona querida se vaya son las más dolorosas. Con los dos las tuve y siento que voy a llevármelas conmigo impagas, no importa cuántas palabras les dedique o cuánto me esfuerce por cumplirles.
Anoche, entonces, soñé con un abuelo y hoy me desperté pensando en los dos. Abrazada a los dos, como si volviera a tener doce o veinticinco años, como si supiera que la pérdida es absoluta y para siempre porque pese a que ya no los tengo, sigo sintiéndolos. Algo en mí los recuerda como eran, con su olor característico y su entorno, el tono de su voz, sus huesos y sus manchas en la piel. Todo.
Y para terminar esta cadena de casualidades, hace quince años (mi abuelo materno cumplía sesentaypico) volaban la AMIA.
Hace diez años, el 18 de julio de 1999, escribía esto en uno de mis cuadernos:
¿Qué pasaba en mi mundo hace 5 años?
Yo tenía 14,
granos en la cara,
usaba anteojos y acababan de sacarme la ortodoncia.
Hace cinco años era lunes,
yo tenía el pelo más oscuro
y la cara más redonda.
Parecía altísima y me sentía un poco gordita.
En Radio Colonia, la única estación de radio que pasaba el aparato de "La Llanura", escuchamos la noticia del desastre y el relato de los pormenores me acompañó toda la semana.
En ese entonces, todavía estaban en casa V..., V... y la P...
Nosotros (papá, mamá y los gurises) pasábamos nuestras primeras "vacaciones de 5" en mucho tiempo.
Hacía mucho frío y la casa era inmensa, con una chimenea hogar que calentaba toda la noche.
Yo me peleaba con mis hermanos y empezaba a congraciarme con mis padres, en plena rebeldía adolescente.
No creía en el amor, sólo en las escenas de besos y de intriga en mis romances inventados, escritos.
(¿Quién va a necesitar amor cuando "lo sabe todo" sobre él?)
Menem preparaba la reelección y Cavallo era ministro de economía (aunque esto no me interesaba en lo más mínimo).
Simultáneamente yo escribía la continuación de mi primera novela, e iba gestando a las protagonistas de otra.
Hace cinco años estaba nublado como hoy,
yo estaba en 2º de secundaria y todavía no me había chocado con la miseria humana,
ninguna amiga me había desilusionado, ningún chico llamaba realmente mi atención (ni yo la de ellos)
Sin embargo, en ese mismo momento un chico del Pío XII organizaba sin saberlo nuestro encuentro, mi primer amor.
Hace cinco años exactos, no soñaba siquiera que pudiera existir alguien así.
Y casi quinientos kilómetros al sur, un adolescente dolorido y callado comenzaba sus vacaciones de invierno pensando "en agosto será mejor",
y se dormía soñando con motores y carreras.
El tampoco pensaba que cinco años después nuestros caminos se cruzarían.
Hace cinco años se rompía la cáscara y nacía una nueva yo,
más callada, más espontánea, más fuerte y menos niña.
Nucna más volví a tener miedo.
(la hoja que señala esa página en el cuaderno, un Rivadavia amarillo de tapas duras, es la noticia de un suicidio que salió publicada en un diario de Gualeguaychú el 29 de marzo de 1999, copiada por mí a mano).
Cerrando:
Mi recomendación para dentro de dos semanas es que, si pueden, vean la película "Anita" de Marcos Carnevale (el mismo de "Elsa y Fred"), que también toca el tema de la AMIA y de los afectos y está muy pero muy bien hecha. Aprovechen los espacios INCAA, que son más económicos que los multisalas si no quieren gastar mucho.
Les dejo el trailer. Buen fin de semana para todos... y ante todo, memoria.
viernes, julio 17, 2009
So long, Mr Darcy
En una charla de sobremesa que tuvimos entre ayer y hoy, surgió el tema y me quedé pensando. Entre las muchas recurrencias de mi vida hay algunas muy curiosas que involucran a mis parejas más estables, o hablando más ampliamente, a los hombres que me cautivaron.
Entre mis amigas me hice desde chica fama de "quedarme con el más feo" (o con el más raro, o con el que nadie disputaría). Era una forma cruel de verlo, porque si bien ninguno de ellos era un Adonis nunca llegué a verlos feos. De hecho, me fascinaban. Nunca pude estar cerca de ningún hombre que no me resulte fascinante, de alguna u otra manera.
Ninguno fue rubio, excepto de chico.
Todos fueron amores a segunda vista.
No los busqué. Llegaron a mí de las maneras más inverosímiles.
La atracción por Austen fue irresistible e inmediata. Yo tenía doce años y nunca había sido besada, no había bailado lentos con ningún chico que me gustase de verdad, no entendía del amor más que la sensación primigenia de las ganas de estar cerca de "él" todo el tiempo, de hacer comentarios que lo hicieran reír, de que me viera como algo más que una gringuita demasiado alta que todavía usaba ropa de nena aunque ya parecía una mujer.
¿Cómo no iba a empatizar de inmediato con esa noción del amor que Austen describía en "Orgullo y Prejuicio"? Una atracción que pasaba por el cuerpo y por la mente y que no llegaba a expresarse en el arrebato, aunque todo el tiempo la química entre los personajes hiciera pensar en la inminencia de un beso (que jamás llegaba). Un espíritu hablando al otro, las palabras entre líneas, el lenguaje corporal que se adivinaba detrás. Fantaseé y soñé con ese libro durante años. Y me pasó como a muchas otras desde hace siglos: me enamoré perdidamente de Darcy.
Todos mis "ellos" tuvieron cosas en común que eran notables a simple vista, pero más significativo aún fue lo que nadie notó, excepto yo: todos tenían algo de Darcy. Del primero al último.
El último fue como llegar a casa en un día lluvioso de invierno.
Escena final
"Debes saber... seguro debes saber que lo hice todo por tí"
So long, Mr. Darcy.
jueves, julio 16, 2009
Ejercicio de autoconciencia / Jueves
Obviamente que si sigo acobardada por mi percepción de otras personas que a mi edad ya tenían o iban encaminadas a conseguir algo parecido a lo que yo aspiro para mí misma, nunca voy a despegar.Y si despego y nadie se da cuenta, es igual a haberme quedado quieta.
Mi mayor problema (lo descubrí gracias a vos, sí... a vos) no es la poca certeza de lo que debe hacerse o cómo, sino la inminencia, siempre postergada o empujada al futuro, del punto de partida.
Cuándo, cuándo, cuándo. No qué, no cómo. Cuándo.
martes, julio 14, 2009
Everybody loves Samanta
Una de las cosas que más me fastidiaban hace un tiempo era esa pátina autorreferencial, muy "nuevocineargentino", que impregnaba casi a toda la narrativa que había caído en mis manos en los últimos cinco o seis años. Y no me refiero sólo a la narrativa argentina. (De todos modos dejé el fastidio de lado hace rato, junto con mi culpa lectora: si no me gusta, simplemente lo abandono... pero esa es otra historia). Schweblin hace que toda traza de autor desaparezca de su ficción, como quien crea un mundo en una habitación cerrada y te deja allí, solo, espectador imposibilitado de escapar de la trama. Es la propia historia la que te suelta, la que te expulsa. Dejarla, al menos a mí, se me hacía imposible.
Devoré el libro de un solo tirón, en una tarde. Creo que me llevó una hora. Lo leí más lentamente en los días sucesivos, imponiéndome un límite de dos cuentos diarios y nada más. Cada tanto vuelvo a abrirlo y a quedarme absorta con "Adaliana", "Matar a un perro" o "Agujeros Negros". Me conmueve de un modo que no puedo explicar con certeza la historia casi cinematográfica de "El momento". Las historias que cuenta Samanta son viscerales, visuales, fantásticas. Coquetean con el horror, con lo que no se dice ni se muestra, y también con las locuras más explícitas como si formaran parte de un acervo cotidiano. Los personajes tienen, la mayoría de las veces, nombres extraños; la mayoría de las veces, son cucos. Antihéroes. Víctimas. Nada es rosa acá, diría Panza.
Lo más inquietante de todo es que pese a la gran difusión de su trabajo en los últimos tiempos y del reconocimiento de muchos de sus pares (sus dos libros de relatos ganaron, respectivamente, el premio Fondo Nacional de las Artes y Casa de las Américas), "El núcleo del disturbio" todavía se puede conseguir fácilmente en las mesas de saldos de Corrientes o de Florida.
lunes, julio 13, 2009
Abrazo de palabras
Lo que me provocan es milagroso.
Pero no voy a decir nada.
Las quiero tanto, que necesitaba escribir esto... Nomás porque ya van como cinco meses que las cuido casi a diario. Porque hoy se cumple una semana desde la última vez que las abracé, y no veo la hora de volver a tenerlas cerca.
Y con ellas a todos esos seres queridos que extraño, que me muero por abrazar y que los vientos de la vida me quitaron por algún motivo.
Hay días en que estoy hipersensible, como hoy. Escribo para no gritar, y persiguiendo abrazos invisibles, termino abrazada a estas palabras.
Es inevitable.
Cuando el amor desborda, es inevitable.
Contra la incoherencia de ciertas prácticas diarias
Me vais a permitir que encarne en el «catálogo de Ikea» todo lo que vienen a ser los folletos publicitarios, triple envoltorio de plástico para las magdalenas, doble precinto de las botellas de agua, flyers, y un largo etcétera de productos de un solo uso con utilidad nula. He escogido al catálogo como cabeza de turco porque es un tocho de papel satinado, a todo color, que yo no he pedido que me envíen y que anuncia un producto en el que el lector sólo estará interesado cuando se mude o reforme su casa, es decir, una o dos veces en la vida.
Por el párrafo anterior ya podéis intuir de qué va el tema. Parece que una magdalena va a estar contaminada de ébola a menos que lleve un plástico individual, otro plástico para el pack de 3 “para llevar” y otro plástico para la bolsa, sumado a un tercer plástico que es la bolsa de la compra. De todos ellos, irónicamente, el único reutilizable es la bolsa de la compra, que la mayoría de la sociedad usamos para tirar la basura. ¿Los otros? Simplemente, forman parte de esa basura. Digo que es irónico porque las administraciones están poniéndose serias para restringir las bolsas del súper, cuando lo que deberían hacer es parar la vorágine de productos de un sólo uso o, sorpresa, de cero usos.
(seguir leyendo)
Más allá de que hay cuestiones que no comparto en lo personal, estoy de acuerdo con la postura crítica asumida por el autor, Carlos Fenollosa. Desde ya, le agradezco haya puesto en palabras los pensamientos que muchos otros estúpidos compartimos (y practicamos) a diario.
Buena semana para todos!
viernes, julio 10, 2009
Locuritas de fin de semana
- Milo publicó el trailer, esperadísimo para mí, de "Where the wild things are". Encima, la música que eligieron es la de Arcade Fire (una de mis bandas preferidas de los últimos tiempos). Voilá.
- Volvió Mamá Lucchetti, para alegría de mis sobrinas, de Fodor y mía.
- GuilleX, de Sunchales, me recuerda que lo bizarro nunca muere. Había visto este video hace como un año. Me matan las caritas de Samwell y la sutileza de la letra (bah, de todo. Ojo, que es "fete", enserio).
Buen (resto del) fin de semana para todos.
(No se malacostumbren: a menos que haya votación masiva de posteo diario, esta regularidad raramente volverá a repetirse :-P)
Ch-ch-ch-ch-changes...
jueves, julio 09, 2009
9 de julio
Ténganme fe.